Los Sitios de Memoria son,
y deben ser, aquellos espacios, lugares, edificios e instalaciones que en su
momento fueron centros de reclusión, de torturas, de humillación, de asesinatos, de miles de uruguayos. Lugares de enterramientos clandestinos. También aquellos
espacios físicos que fueron en su momento lugares emblemáticos de resistencia
popular.
El próximo viernes 30 de
agosto se celebra el Día internacional del Detenido Desaparecido. En la mañana,
a las 10.30 horas se inaugura un Sitio de Memoria en Camino a la Memoria y Ruta
85, en Toledo, Departamento de Canelones. En ese lugar, se encontraron, hace algunos
años, los restos mortales del maestro Julio Castro y, posteriormente, de
Ricardo Blanco Valiente.
En
el predio del Batallón de Infantería Paracaidistas N° 14
se encontraron enterrados los restos del maestro
Julio Castro y de Ricardo Blanco Valiente.
|
Dos
casos paradigmáticos
Julio Castro fue un
educador de prestigio y reconocimiento internacional. Un periodista uruguayo, militante sindical y
político. Un intelectual prestigioso. Fue secuestrado por la dictadura cívico-militar
el 1 de agosto de 1977 debido a las acciones de resistencia que llevaba a cabo.
Siendo una persona ya mayor en el momento de ser detenido, durante muchos años
se pensó que había muerto mientras era torturado en el Centro de torturas
conocido como “La Casona”. Al hallarse sus restos, se descubrió que fue
ejecutado al pie de la tumba con un disparo a quemarropa en la cabeza.
Permaneció como detenido
desaparecido durante 34 años, hasta el 21 de octubre de 2011, cuando su cuerpo
fue encontrado en un enterramiento clandestino realizado por el personal
militar uruguayo en este predio militar en Toledo.
Su desaparición
y búsqueda fueron emblemáticas, ya que fue
la primera desaparición forzada enmarcada en la represión de las dictaduras en
América Latina investigada en particular por las organizaciones de defensa de
Derechos Humanos.
Ricardo Blanco Valiente,
detenido el 15 de enero de 1978 cuando tenía 39 años de edad, oriundo de
Mercedes, fue militante sindical de Aute y militante del Partido Comunista
Revolucionario (PCR). Fue interrogado también en La Casona por personal del Servicio
de Información de Defensa (SID) y se lo vio por última vez, en muy malas
condiciones físicas, debido a las torturas sufridas, en el centro clandestino
de detención y torturas La Tablada que dependía del Organismo Coordinador de
Operaciones Antisubversivas (OCOA).
Sus restos mortales, en un
enterramiento primario, fueron encontrados el 15 de marzo de 2012 por el Grupo de Investigación
en Antropología Forense (GIAF) de la Universidad de la República, Facultad de
Humanidades y Ciencias.
La
desaparición forzada: una metodología cruel
La desaparición forzada de
ciudadanos por parte de funcionarios del Estado es una práctica represiva cruel e inhumana que merece la
mayor de las condenas en todos los planos. Una metodología auténticamente
condenable y repugnante.
Durante el período conocido
como Terrorismo de Estado, casi doscientos uruguayos fueron secuestrados y
desaparecidos en el marco del Plan Cóndor dentro y fuera de las fronteras
nacionales por parte de los servicios represivos.
Los primeros (Héctor Castagneto Da Rosa y Abel Ayala) por parte del Escuadrón
de la Muerte cuando gobernaba Jorge Pacheco Areco. Roberto Gomensoro Josman fue
desaparecido en marzo de 1973 por parte
de las Fuerzas Armadas como lo declaró recientemente José Nino Gavazzo, durante el gobierno de Juan María Bordaberry.
El resto, luego de la disolución de las Cámaras en junio de 1973. Muchos de
ellos en el marco del Plan Cóndor y al amparo de la Doctrina de la Seguridad
Nacional.
Hasta el momento sólo se
ha podido esclarecer un pequeño número de casos y se han identificado solamente
los restos de cinco detenidos
desaparecidos. Jurídicamente, la Suprema Corte de Justicia, incluso, no las
considera hasta el momento como Crímenes de Lesa Humanidad y ha autorizado las
prisiones domiciliarias para los escasos condenados.
Nuevas
facultades a la INDDHH
Hace 15 días, el Poder
Ejecutivo remitió al Parlamento un proyecto de ley atribuyendo nuevas
facultades a la Institución Nacional de DDHH y Defensoría del Pueblo (INDDHH)
para que pueda continuar las investigaciones al respecto.
Dotar a la INDDHH de
facultades reales para llevar a cabo investigaciones a fondo, con metodología
criminalística, interrogando a los potenciales involucrados, allanando domicilios,
solicitando compulsivamente información y archivos, son herramientas
imprescindibles.
Al crear la Fiscalía
Especializada en Crímenes de Lesa Humanidad, tanto el Poder Ejecutivo como el
Legislativo han emitido un mensaje claro y contundente sobre su compromiso con la Verdad de lo ocurrido y con la Justicia
como herramienta fundamental para construir una sociedad sólida y democrática.
INDDHH:
facultades para seguir investigando
La investigación, el
esclarecimiento y la sanción de las graves violaciones a los DDHH es un camino
esencial a recorrer para que ellas no
vuelvan a ocurrir. Es un camino imprescindible para afirmar las normas de derechos humanos, el
Estado de Derecho y la propia institucionalidad democrática.
La creación de la
INDDHH ha sido un auténtico logro de la
sociedad uruguaya de los últimos años. Ha contribuido a mejorar la conducta
estatal, una convivencia más digna y más humana. Ha jugado un papel importante en lo referido
a la conciencia social de los DDHH.
Desde su constitución, si
bien ha sido duramente atacada y cuestionada en forma constante por los
sectores más conservadores y los medios de comunicación como El País, ha
logrado un importante reconocimiento a nivel de toda la sociedad, en especial
entre los sectores más vulnerables y desprotegidos de ella.
Otorgar a la Institución
Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo estas nuevas atribuciones
para que pueda investigar hechos de
enorme trascendencia histórica y vital para la afirmación democrática, tal como lo plantea el proyecto de ley remitido
por el Poder Ejecutivo, es una iniciativa valiosa y muy trascendente.
Al convocar a estas
actividades en este día tan especial, exhortamos a todas y todos los
parlamentarios a aprobar, a la mayor brevedad, el proyecto de ley remitido por
el Poder Ejecutivo sin desvirtuarlo. Llamamos a todas y a todos los ex presos
políticos a seguir movilizados para construir un auténtico Nunca Más.
-------
Opinando N° 16 – Año 8 –
Martes 27 de agosto de 2019