El derecho a opinar y los
tapabocas pro gubernamentales El País: la imundicia de siempre
Ante la grave situación
que vive el país, el gobierno ha tomado un número importante de medidas para
evitar su expansión y mitigar los efectos de la crisis en todos los campos.
Diariamente ha llamado conferencias de prensa y ha mantenido informada a la
población.
Las organizaciones
sociales con una larga tradición de participación y compromiso con la
problemática del país y de la gente, con la libertad, la democracia y la
institucionalidad democrática, con una visión crítica, hemos expresado
públicamente nuestras inquietudes y preocupaciones en la coyuntura, el pasado
lunes 23. Además, con la misma responsabilidad que nos ha caracterizado, hemos
presentado públicamente un conjunto de propuestas, complementarias, para
aportar a la búsqueda y al debate nacional. Apuntan a los sectores más
vulnerables y desprotegidos, a la población de los barrios más carenciados y de
los asentamientos.
La gente tiene que comer:
renta básica transitoria
Ante la grave crisis,
además de las medidas sanitarias o en su apoyo, el gobierno, en una actitud
loable, ha tomado un número importante de medidas para asegurar el
mantenimiento de las fuentes de trabajo, ha flexibilizado las condiciones para
acceder al seguro de desempleo, ha destinado sumas muy importantes para
fortalecer la asistencia a los sectores más vulnerables a través del Mides. Ha
permitido que el Banco República, en una medida
sumamente
atinada, que aliviará de manera directa a más de medio millón de hogares,
permita postergar el pago de los créditos de los jubilados, pensionistas y de
consumo que lo así lo soliciten durante tres meses.
Es una decisión
inteligente, que no exige ninguna inyección de dinero y da tranquilidad a más
de medio país. En situaciones como las actuales, los jubilados y pensionistas,
muchas veces, junto con los empleados públicos, son el principal sustento de
los hogares más humildes como ha quedado históricamente demostrado, especialmente
al principio del siglo XXI durante el gobierno del Dr. Jorge Batlle.
Los informales precisan
una solución
La realidad indica, sin
embargo, que hay miles de uruguayos que trabajan en la informalidad en
diferentes oficios y labores que nunca podrán acceder a los beneficios del
seguro de desempleo y que viven día a día, muchos de ellos. Es un grupo muy
numeroso de ciudadanos que precisan soluciones en forma inmediata, no tienen
ahorros ni reservas.
La renta básica
transitoria, propuesta por el Pit Cnt y la intersocial que integramos como
miembros de ONAJPU, es una iniciativa destinada a asegurar ingresos en forma
inmediata a estos sectores que son una parte muy importante de la población y
una parte de la realidad nacional, tal como se ha visto repetidamente en los
medios de comunicación e informativos en los días recientes.
Los tapabocas mediáticos
Los voceros oficiosos del
gobierno, asociados tradicionalmente a las posiciones conservadoras, más
realistas que el rey, Porzecansky, Conrado Hughes, Adolfo Garcé, entre otros,
al igual que los históricos voceros del terrorismo de Estado como El País, han
pretendido criminalizar y satanizar los puntos de vista distintos, diferentes,
que se han presentado en estos días y que suscribimos en líneas generales.
Han puesto el grito en el
cielo por convocar a un caceloreo, una pacífica acción de respaldo a una
propuesta, como si se tratara de llamar a realizar destrozos en la vía pública
y romper vidrieras, asaltar supermercados, poner coches bombas, atentar con
explosivos o secuestrar ministros.
El derecho a estar
organizados, a expresar las opiniones y puntos de vista, a movilizarse e,
incluso, a protestar pacífica y públicamente, es una larga y dolorosa conquista
del pueblo uruguayo, en la cual participamos activamente y reivindicamos. Hasta
el Presidente lo dijo claramente: están en su derecho.
Se acabó, hace ya 35
años, la época de los comunicados de la Dinarp que con tanta fruición
reproducía El País. No son solamente las cámaras empresariales,
las
sociedades de bancos, las gremiales del campo y los medios hegemónicos de
comunicación quienes tienen derecho a opinar.
Las organizaciones
sociales, por razones de pública notoriedad, imposibilitadas de convocar
concentraciones, paros, ocupaciones, mitines, actos, marchas, piquetes,
espectáculos artísticos, actividades religiosas o similares, hemos convocado un
caceloreo y un apagón de 10 minutos, para esta noche, para dar mayor
visibilidad a las propuestas formuladas, con la sana expectativa de que ellas sean
acogidas e implementadas a la mayor brevedad.
La realización del
caceroleo ha sido la gran excusa para invisibilizar la necesidad de implementar
la renta básica transitoria por parte de los sectores conservadores. El
diálogo, el debate, el intercambio de opiniones, la negociación son
herramientas imprescindibles de la vida democrática, junto con la movilización.
El bienestar y la
tranquilidad de miles de uruguayos dependen de implementar medidas urgentes
para los más necesitados. Que así sea. Junto a ellos y al movimiento sindical
estamos como colectivo.
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Opinando N° 4 – Año 9 – Miércoles 25 de marzo de 2020