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miércoles, 1 de julio de 2020

Pura boca


Pura boca


Manini Ríos ocultó información clave y encubrió  un crimen horrendo

En la campaña electoral, cuando estalló el escándalo, anunció a los cuatro vientos, especialmente a las cámaras de televisión, que renunciaría a los fueros parlamentarios para comparecer ante la justicia. Su organización política, Cabildo Abierto, acompañaría el pedido de desafuero, que exigiría a los partidos que integran la coalición de gobierno que hicieran lo mismo, que no tenía nada que ocultar. Finalmente, para escapar al brazo de la justicia, terminará cobijado bajo el ala protectora del prohombre de la impunidad Julio María Sanguinetti, siempre predispuesto y comedido para ello.

Guido Manini Ríos: encubrió a Gavazzo

El delito cometido por el general Guido Manini Ríos es grave. Su omisión de denunciar ante la justicia la confesión voluntaria que brindara José Nino Gavazzo ante el Tribunal de Honor que lo juzgaba, hubiera permitido que continuara como inocente de dicho crimen. La causa judicial de Roberto Gomensoro que lo involucraba había sido archivada. José Nino Gavazzo había sido exculpado en ella por falta de pruebas, ante su testimonio negativo en los estrados judiciales.

La difusión pública que sobre el funcionamiento del Tribunal de Honor realizó el periodista Leonardo Haberkorn posibilitó que el Fiscal Especializado en Crímenes de Lesa Humanidad, Dr. Ricardo Perciballe, solicitara y lograra la reapertura de la causa de Roberto Gomensoro Josman.

Roberto Gomensoro: el primer desaparecido por las FFAA

Roberto Gomensoro es un caso emblemático del terrorismo estatal. Fue detenido por las Fuerzas Armadas en marzo de 1973, antes de la disolución de las Cámaras, conducido al Batallón de Artillería N°1, asesinado, durante los inmediatos y apremiantes interrogatorios a que fue sometido. Su cuerpo fue desaparecido. Sus restos fueron identificados luego de varias décadas.

Manini debió denunciar por escrito

Todos los funcionarios del Estado en el ejercicio de sus funciones tienen la obligación de denunciar ante la justicia los hechos con apariencia delictiva acerca de los cuales toman conocimiento.

El general Guido Manini Ríos, como Comandante en Jefe del Ejército, debió informar por escrito a la justicia penal que José Nino Gavazzo había declarado, voluntariamente, ante un tribunal de honor, haber hecho desaparecer el cuerpo de Roberto Gomensoro Josman arrojándolo a las aguas del Río Negro.

Asimismo debió haber informado, de manera formal, como corresponde en la función pública, que en el mismo tribunal el ahora coronel en situación de reforma Jorge “Pajarito” Silveira declaró que Gavazzo fue el responsable del asesinato de otra persona que estaba detenida en el cuartel de Artillería N° 1 y que permanece desaparecida hasta el día de hoy.

La omisión flagrante y comprobada de Guido Manini Ríos de cumplir con su obligación de informar a la justicia acerca de un hecho con clara apariencia delictiva es un delito penado por las leyes vigentes. También fue un acto solapado de ocultamiento y encubrimiento de su parte de la responsabilidad de José Nino Gavazzo para garantizar su impunidad.

Tres generales lo denunciaron

A igual que los demás terroristas estatales, desde el retorno a la institucionalidad democrática, Guido Manini Ríos niega su responsabilidad en los hechos. Acusa al poder judicial de perseguirlo siguiendo directivas del poder político. Se presenta ante la opinión pública y los medios de comunicación victimizándose. Como sus colegas involucrados en los crímenes de Lesa Humanidad recurrió a todas las dilatorias habidas y por haber para evadir la justicia.

Al presentar testimonio ante la justicia, indagados por su participación en el tribunal de honor que juzgó la conducta de José Nino Gavazzo y de Jorge “Pajarito” Silveira, los generales Alfredo Erramún, Gustavo Fajardo y José González, denunciaron a Manini Ríos.

Los tres generales declararon que ellos lo alertaron en dos oportunidades acerca del tenor de las declaraciones a las cuales accedieron y le recomendaron dar cuenta formal al Poder Judicial.

El comandante en jefe, así consta en el expediente administrativo, desechó lo asesorado por sus generales. Consciente de las implicancias jurídicas y políticas que la presentación de la denuncia podía tener, optó por no realizarla y encubrir a los involucrados: José Nino Gavazzo y Jorge “Pajarito” Silveira. Se limitó a adjuntar las actas de las sesiones del tribunal de honor para que ellas, en un expediente de 700 páginas, pasaran desapercibidas, sin llamar la atención.

La carrera non santa de Guido Manini Ríos

Siendo oficial del ejército durante todo el “proceso”, Guido Manini Ríos fue cesado por el Poder Ejecutivo del Dr. Tabaré Vázquez en marzo de 2019, por realizar comentarios políticos sobre la actuación del Poder Judicial. Cuestionó la labor del mismo y defendió a todos los condenados por ella durante el período del terrorismo de Estado. A las pocas semanas, todos los defendidos por Manini Ríos fueron condenados a cadena perpetua por un Tribunal en Roma.


Sanguinetti y la coalición lo protegerán

Hasta el momento en Uruguay, solamente un pequeño grupo de criminales estatales ha sido juzgado y condenado, a diferencia de lo ocurrido en Argentina y Chile. A pesar de ser cuestionada de manera recurrente desde el Centro Militar y por parte de quienes ofician de voceros circunstanciales, la justicia uruguaya, el poder del Estado con las potestades de investigar y esclarecer los hechos delictivos, no se ha caracterizado por su ejecutividad ni compromiso, salvo excepciones remarcables, con el juzgamiento de los criminales estatales.

A instancias del Dr. Julio María Sanguinetti, todo parece indicar que faltarán los votos en el Senado para que el general Guido Manini sea juzgado y condenado por haber encubierto a José Nino Gavazzo incumpliendo su obligación de informar por escrito a la justicia. Una vez más, el Dr. Sanguinetti oficia de paladín de la impunidad y saca las castañas del fuego a los terroristas estatales y sus cómplices.

La credibilidad de Manini Ríos descenderá ante los ojos de la opinión pública y ante la consideración de sus aliados. Pura boca: no renuncia a su banca, se escabulle, por ahora, en los fueros previstos para otras problemáticas.

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Opinando N° 9 – Año 9 – Miércoles 1° de julio de 2020